Gran amante de las artes y aficionado a la pintura desde su juventud, Francisco Belda y Pérez de Nueros, III marqués de Cabra (El Coronil, Sevilla 1860 - Madrid 1931), es una figura clave en la historia de la colección patrimonial del Banco de España, institución a la que sirvió a lo largo de cincuenta años, pasando por diversos puestos de su escalafón hasta ser nombrado, en 1927, subgobernador primero.

Son muchas sus aportaciones a este respecto, aunque hay una que resulta especialmente significativa. A finales de la década de 1890, Belda descubrió en una de las habitaciones de la sede que la entidad tenía en la calle Atocha, seis cuadros en los que aparecían retratados varios directores del Banco Nacional de San Carlos —José del Toro Zambrano, Francisco Cabarrús, Francisco Javier Larumbe, Vicente Joaquín Osorio de Moscoso (conde de Altamira) y Miguel Fernández Durán y López de Tejeda (marqués de Tolosa)—, así como el monarca Carlos III. Dotado de gran sensibilidad y conocimientos artísticos, reconoció en ellos la mano de Francisco de Goya y Lucientes. Su convencimiento era tal que, como nos explica la historiadora Elena Serrano García, cuando algunos especialistas dudaron de que fueran de autoría del pintor aragonés, investigó en los archivos que se conservaban del Banco de San Carlos, hallando en sus libros de actas los encargos que se le habían hecho y en sus libros de contabilidad, los asientos de los pagos.

^{Francisco de Goya y Lucientes: retratos de José de Toro-Zambrano y Ureta (1785), Francisco Cabarrús y Lalanne (c. 1787) y Francisco Javier Larumbe y Rodríguez (1787)}

^{Francisco de Goya y Lucientes: retratos de Vicente Joaquín Osorio de Moscoso y Guzmán Fernández de Córdoba y la Cerda, XIII conde de Altamira (c. 1786), Miguel Fernández Durán y López de Tejeda, II marqués de Tolosa (c. 1786) y El rey Carlos III (c. 1786)}

En 2328 reales de vellón, la exposición sobre los orígenes de nuestra Colección que puede visitarse hasta el 26 de febrero de 2022, se incluyen varios de esos documentos. De hecho, el título de la muestra hace referencia a la cifra que aparece consignada en uno ellos como pago a Goya por el retrato de José del Toro Zambrano, el primero que realizó para el Banco. Tanto este retrato como los anteriormente citados de Cabarrús, Larumbe, conde de Altamira, marqués de Tolosa y Carlos III también forman parte de la exposición, donde se pone de relieve el papel fundamental que ha jugado la figura de Goya en la conformación y devenir posterior del fondo patrimonial del Banco de España.

^{Francisco Belda y Pérez de Nueros, III marqués de Cabra: retrato de Benito Fariña Cisneros (1903)}

Descendiente del político cordobés Martín Belda y Mencía del Barrio, que fue gobernador del Banco de España desde febrero de 1878 hasta marzo de 1881 y de quien hereda el título de marqués de Cabra, Francisco Belda y Pérez de Nueros tuvo siempre, como apuntábamos antes, un vínculo muy estrecho con el arte. En su juventud fue premiado con varios diplomas y medallas por la Escuela de Artes y Oficios de Madrid y en 1903, cuando ya ocupaba el cargo de vicesecretario en la institución, realizó un retrato, dotado de gran fuerza expresiva, del subgobernador Benito Fariña Cisneros, personaje también muy importante dentro de la historia de la entidad.

^{Antonio María Esquivel y Suárez de Urbina: retrato de Pedro Sainz de Andino (1831)}

Amigo de numerosos artistas e historiadores del arte, Belda fue, además, un activo coleccionista, llegando a adquirir un retrato del jurista Pedro Sainz de Andino, autor de los estatutos del Banco de San Fernando, que había llevado a cabo en la década de 1830 Antonio María Esquivel. Retrato que, según Elena Serrano García, puso a disposición del Consejo de administración del Banco de España por el mismo precio de mil pesetas que él había pagado y que también forma parte de la muestra 2328 reales de vellón.

^{José Villegas y Cordero: retrato de Francisco Belda y Pérez de Nueros, III marqués de Cabra (1905)}

Cabe señalar, por último, que la Colección Banco de España cuenta con un retrato de él que realizó en 1905 José Villegas y Cordero. En el mismo, el pintor sevillano —que poco años antes hizo por encargo de la entidad la efigie de Alfonso XIII, así como una serie de diseños para billetes donde emplea un depurado lenguaje simbolista para sustanciar conceptos relacionados con su valor fiduciario— representa a Belda con gesto empático y cercano, carente de afectación, en una composición pictórica de sorprendente audacia. Este óleo, por cierto, guarda una relación muy estrecha con otro que realizó  Villegas por las mismas fechas: el retrato del escritor, periodista y pintor madrileño Jacinto Octavio Picón (1903), conservado actualmente en el Museo del Prado.