Reputado jurista especializado en materia comercial y tributaria, Salvador Albacete (Cartagena, Murcia 1827 - Madrid, 1890) fue gobernador del Banco de España de 1885 a 1890, siendo el que más años ocupó el cargo durante la construcción del edificio de Eduardo de Adaro. Edificio que, finalmente, no pudo ver inaugurado. La mañana del 4 de agosto de 1890, cuando se encontraba en su despacho, situado aún en la anterior sede de la entidad en la calle Atocha, sufrió una apoplejía, falleciendo en su domicilio pocas horas después. Se da la circunstancia de que, aunque no pueda establecerse una relación de causa y efecto, tan solo dos días antes Adaro le había escrito para comunicarle que no se podían colocar aún los peldaños de mármol de la escalera principal, lo que suponía añadir un nuevo retraso para la finalización de la obra.  

Tras su fallecimiento, el Consejo de Gobierno del Banco acordó la realización de un retrato del finado con destino a la galería de gobernadores. Ese retrato sería realizado por Francisco Más y Carrasco, pintor valenciano que en esas fechas gozaba de cierto reconocimiento en Madrid, y a quien, como documentan recibos conservados en el archivo del Banco, se le abonó 1000 pesetas por el trabajo, formalizándose el pago los días 10 y 12 de octubre de ese mismo año. Sin embargo, hasta ahora el óleo se había atribuido a un desconocido pintor llamado J. Mas e incluso antes que a él al artista catalán Joaquín Mir y Trinxet.

La razón de esta confusión, nos explica Esperanza Guillén, comisaria junto a Yolanda Romero de la exposición La arquitectura de Eduardo de Adaro y el Banco de España. Un mundo en transformación y autora del libro Eduardo Adaro. Arquitecto del Banco de España, publicado en paralelo a la inauguración de la muestra, se debe a una lectura errónea de la grafía de la inicial que abreviaba el nombre propio del pintor, interpretándose la F como una J. "Pero la comparación de firmas y una reciente localización de documentos en el Archivo Histórico del Banco de España", subraya Guillén, "demuestran, sin ningún género de duda, que se trata de una obra de Francisco Más y Carrasco". 

^{Francisco Más y Carrasco: Retrato de Salvador Albacete (1890)}

Existe muy poca bibliografía sobre este pintor valenciano, desconociéndose, por ejemplo, las fechas de su nacimiento y muerte, aunque sí se sabe que destacó como autor de paisajes, tanto naturalistas como de inspiración literaria, y de retratos, como este de Salvador Albacete donde, según Esperanza Guillén, "se manifiesta como un artista que se distancia de los definidos perfiles que determinan buena parte del arte académico del momento". Lo realizó de manera póstuma, valiéndose para llevarlo a cabo probablemente de fotografías que había del gobernador, cuya gestión coincidió con el momento en el que el Banco se hizo cargo del servicio de Tesorería del Estado y de la deuda flotante del Tesoro.

Francisco Más lo retrata sobre un fondo oscuro, sin tramoya, con el rostro casi de perfil y unos quevedos de montura metálica de los que pende un fino cordón. Está sentado en un sillón con brazos de madera, mirando hacia fuera, con gesto serio aunque no severo, y viste camisa blanca y traje de chaqueta y lazada negros, una indumentaria muy alejada de las de carácter más protocolario que pueden observarse en otras pinturas de la galería de gobernadores. También de la que luce el propio Albacete en el retrato, propiedad del Museo del Prado y actualmente depositado en el Museo de Jaén, que le realizó el pintor sevillano Manuel García "Hispaleto" y donde aparece ataviado con la gran cruz y la banda de la orden de Carlos III, como ministro de Ultramar, cargo que ocupó en 1879. De factura suelta y composición sencilla, el retrato de Más se caracteriza por el uso de una limitada gama cromática, dominando los tonos ocres en la parte superior y los oscuros en el resto del óleo, solo animados por los acentos claros que marcan las manos, los filos de la camisa que asoman sobre estas y los brillos del barniz de la madera del sillón en el que se sienta el gobernador.

^{Manuel García "Hispaleto": Salvador Albacete, ministro de Ultramar}

Como señalábamos antes, la bibliografía existente sobre Francisco Más es escasa y la que hay incluye algunos errores, probablemente originados por el Diccionario biográfico de artistas valencianos que el Barón de Alcahalí publicó en 1897. A través de información obtenida en la prensa de la época, así como en los catálogos de algunas de las exposiciones en las que Más participó, Esperanza Guillen ha podido certificar que tras una primera etapa en Valencia donde logra un cierto reconocimiento con sus paisajes costumbristas (en 1881, por ejemplo, su obra Un país, recibe una mención honorífica en una exposición del Ateneo Casino Obrero), a mediados de la década de 1880 llega a Madrid para ampliar su clientela y entabla relación con artistas consagrados como Mariano Benlliure o Juan Luna Novicio. Desde muy pronto se gana el aprecio de determinados círculos intelectuales de la capital de España e incluso en un ejemplar del semanario Madrid Cómico, aparece en la portada una caricatura suya con la paleta de pintor.

A finales de esa década y principios de la de 1890 también participa en algunas exposiciones en Barcelona e inicia una estrecha colaboración con el Círculo de Bellas Artes. Prueba de esto último es que en junio de 1894 la revista Blanco y Negro publicó, bajo el título de Los doce del Círculo, una serie de caricaturas de pintores realizada por Ramón Cilla y él era uno de los retratados. Cabe señalar aquí que en esta serie también aparecen representados artistas como Joaquín de Sorolla, Tomás Muñoz Lucena o Ricardo de Madrazo, quienes, al igual que Más, se sumaron a la donación de obras para sufragar el monumento dedicado a Velázquez que se instalaría en 1899, coincidiendo con el 300 aniversario de su nacimiento, frente al Museo del Prado y cuyo autor fue el escultor Aniceto Marinas.

^{Ramón Cilla: Los doce del Círculo. Caricaturas publicadas en la revista Blanco y Negro en junio de 1894 y en la que se incluía un retrato de Francisco Más [imagen derecha]}

Una de las últimas referencias a su actividad en nuestro país es su participación en las tertulias organizadas por el político y escritor Vicente Riva Palacio, ministro de México para España y Portugal, en Madrid. Quizás su relación con Riva Palacio influyó en su decisión de viajar en torno a 1896/1897 a México, en cuya capital establece en esos años su residencia y taller, como atestigua una reseña que hizo el poeta Juan José Tablada de una visita a su estudio y donde describe varias de las obras que el pintor estaba por aquel entonces realizando, destacando un retrato en "claroscuro" del novelista Federico Gamboa. Entre los trabajos de Francisco Más que hay localizados en México podríamos mencionar El toro, conservado por la Pinacoteca del Ateneo Fuente en Saltillo, Los charros, adquirido en 1908 para las galerías de la antigua Academia de San Carlos, o un cuadro con un escudo que presidiría el Aula Mayor de la Universidad Nacional Autónoma de México cuando esta se instaló en la antigua Escuela Normal de la capital de este país latinoamericano.