El apellido Domínguez, que figuraba en su día en una etiqueta pegada al dorso de este cuadro, ha sido quizá la causa de que no se vieran claramente las semejanzas de color, composición e incluso tamaño con el retrato de Amadeo I debido también a Carlos Luis de Ribera, semejanzas que sin embargo resultan patentes. Actualmente ya no cabe duda en esta atribución, al haber sido descubierta la factura de 20000 reales de vellón (el mismo precio que el cuadro de Amadeo de pocos años antes) que presenta dicho pintor al Banco de España el 29 de marzo de 1875. Nacido el 28 de noviembre de 1857, el joven Alfonso todavía no había cumplido los veinte años cuando fue proclamado, en Sagunto, rey de España el 29 de diciembre de 1874, con su entrada triunfal en la Villa y Corte en el mes de enero siguiente. Como en el caso de su antecesor, el Banco encargó su retrato a Carlos Luis de Ribera.

Para retratar a Alfonso XII, Ribera sigue un esquema casi idéntico al empleado con Amadeo I, incluso en la gama de color, basculante entre ocres, rojos y amarillos, y en la decisión de retratarlo en uniforme de montar. Solo se diferencia el retrato del hijo de Isabel II en el fondo, más abocetado, y en el aspecto menos gallardo, más indeciso y amable del monarca, a quien unos retoques han corregido lo ajustado del calzón de montar. Alfonso XII contrajo matrimonio en 1878 con su prima María de las Mercedes de Orleans y Borbón, que murió a los cinco meses de la boda; y, en segundas nupcias, con María Cristina de Habsburgo Lorena, el 29 de noviembre de 1879. Murió el 25 de noviembre de 1885.

• Julián Gállego Serrano
• María José Alonso