Tomás Castellano y Villarroya

Tomás Castellano y Villarroya

  • 1904
  • Óleo sobre lienzo
  • 129 x 95 cm
  • Cat. P_236
  • Encargo al autor en 1903
Por:
Javier Portús

Aunque en algunos de los retratos de la serie de gobernadores de las últimas décadas del siglo XIX se plantearon algunas alternativas -en clave civil y profesional- al traje oficial, este se resistió a desaparecer, como muestra esta efigie, una de las más aparatosas de la serie. Lo es por la importante presencia de la banda y la Gran Cruz de la orden de Isabel la Católica y por la gran extensión y protagonismo de los bordados dorados que incluyen el tema de los ojos de Argos, que se multiplican por el pecho y por las mangas, en este último caso sobre un vistoso campo rojo. La espada sobre la que sujeta la mano izquierda y la mirada levantada y ajena al espectador completan ese discurso en el que se resaltan los atributos y las actitudes de poder.

Javier Portús

 
Por:
Julián Gállego Serrano, María José Alonso
Salvador Martínez Cubells
València 1845 - Madrid 1914

Consumado retratista, realizó su formación junto a su padre, Francisco Martínez Yago, restaurador del Museo de València, y en la Academia de San Carlos. Obtuvo numerosos galardones en las exposiciones nacionales, entre ellas sendas primeras medallas en las de 1878 y 1887 por sus lienzos Educación del Príncipe don Juan, que presentó también a la Internacional de París del mismo año, y Doña Inés de Castro. Medalla de Oro en la Exposición Regional de València de 1867, en la que exhibió un retrato de su padre y en la Internacional de Múnich de 1909. Realizó pinturas para la iglesia de San Francisco el Grande de Madrid y fue además coleccionista de obras de arte. En 1870 obtuvo por oposición la plaza de primer restaurador del Museo del Prado, donde realizó intervenciones que marcaron un hito en su carrera, como la del San Antonio de Murillo, en 1875, y el traslado del muro al lienzo de las Pinturas negras de Goya. Profesor de la Escuela de Artes y Oficios de Madrid, en 1891 ingresó en la Academia de San Fernando. Recibió la Gran Cruz de la orden de Isabel la Católica y fue nombrado comendador de la orden de Carlos III.

 
Por:
Elena Serrano García
Tomás Castellano y Villarroya (Zaragoza 1850 - Madrid 1906)
Gobernador del Banco de España 1903 - 1904

Perteneciente a una familia de la alta burguesía local de Zaragoza, Tomás Castellano y Villarroya estudió las carreras de Derecho y Filosofía y Letras con brillantes resultados. En 1870 entró a formar parte del Consejo de Administración de la casa de banca familiar Villarroya- Castellano, antecesora del futuro Banco de Aragón (1910). De ideas conservadoras, en 1878 fue elegido diputado por Ejea de los Caballeros, escaño que no abandonó hasta su muerte, acaecida en 1906.

Tomás Castellano fue un claro representante del mundo de las influencias políticas de las oligarquías locales de finales del siglo XIX. Sus gestiones lograron grandes beneficios económicos a la región aragonesa, como la construcción del ferrocarril de Canfranc, de escuelas y centros de beneficencia, de los pantanos de Mezalocha y la Peña y de los puentes del Pilar y Gallur. Fomentó diversas industrias agropecuarias (harineras, azucareras, vinícolas, cárnicas) en Aragón y puso en marcha otras nuevas, como papeleras y químicas, ocupando muy a menudo sus consejos de administración. Fue propietario de El Diario de Zaragoza, lo que extendió su influencia a la opinión pública.

Gran amigo y seguidor de Cánovas del Castillo, fue nombrado ministro de Ultramar en el Gobierno formado en marzo de 1895. Se hizo cargo de la cartera de Hacienda en agosto de 1897, en el gabinete del general Marcelo Azcárraga. Su nombramiento como gobernador del Banco de España en diciembre de 1903 respondió esencialmente al prestigio alcanzado por Castellano en las cuestiones financieras y bancarias aragonesas, orientando su gestión, con éxito, a disminuir el ritmo de la circulación fiduciaria e impulsar el desarrollo mediante la expansión del crédito y el fomento del trabajo nacional. Fue ministro de Hacienda de diciembre de 1904 a enero de 1905, aunque la brevedad del mandato impidió que su experiencia y capacidad en la material pudieran hacerse visibles. Era el único miembro del gabinete que acompañaba a Cánovas cuando fue asesinado en 1897 en el balneario de Santa Águeda.

Elena Serrano García

 
 
Alfonso E. Pérez Sánchez y Julián Gállego Banco de España. Colección de pintura, Madrid, Banco de España, 1985. Alfonso E. Pérez Sánchez, Julián Gállego y María José Alonso Colección de pintura del Banco de España, Madrid, Banco de España, 1988. VV. AA. Colección Banco de España. Catálogo razonado, Madrid, Banco de España, 2019, vol. 1.