Helena Almeida: 'Seduzir', 2002 [detalle]

Colección

Retrato de Luis María Linde

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CARMEN LAFFÓN

Retrato de Luis María Linde

  • 2020
  • Óleo sobre lienzo
  • 135 x 100 cm
  • Cat. P_820
  • Encargo al autor en 2018
Por:
Isabel Tejeda

Carmen Laffón (Sevilla, 1934-2021) realizó entre 2018 y 2020 el que sería su último encargo para la Colección Banco de España: el retrato del economista Luis María Linde (Madrid, 1945), que fue gobernador del Banco de España entre 2012 y 2018. Una pintura que solo ha sido expuesta en la galería de retratos de la institución. Iniciada a finales del s. XVIII, esta galería, que suma efigies de personalidades relacionadas con el Banco o con el Estado, cuenta con los pinceles más sobresalientes de cada momento histórico: desde Goya, a Sorolla, Zuloaga o la misma Laffón.  Para esta ocasión, el modelo posó en varias ocasiones para la pintora sevillana en su estudio de Sanlúcar de Barrameda, si bien Laffón eligió como fondo una parte emblemática del monumental edificio de la calle de Alcalá, la que en la actualidad es la sala de lectura de la Biblioteca, recientemente restaurada, pero que se diseñó en 1891 como patio de operaciones; un elegante patio abrazado por una blanca celosía de hierro colado. Luis María Linde tiene a sus espaldas esta esbelta arquitectura que se asemeja a un encaje, en la pintura de Laffón a un tul bordado, y que es la fuente lumínica de la obra; una luz que genera una atmósfera lírica y evanescente que diluye las formas y que, con una paleta aparentemente reducida a los blancos, grises y ocres, se revela de una gran riqueza cromática y de texturas en las distancias cortas. El gobernador posa sentado desde la galería alta del primer piso y mira hacia el espectador; contrario a la tradición del retrato institucional, se muestra a contraluz en una zona de semisombras, solo iluminado parcialmente desde el lateral derecho.

La luz y los incontables tonos de blanco son los grandes protagonistas del lienzo, junto con el retratado. Es de reseñar que la pintora llevaba a cabo en paralelo a esta pintura su última serie de relevancia, unas piezas de gran formato que tenían como motivo las salinas de Bonanza, en Sanlúcar de Barrameda. En este entorno gaditano, Laffón empezó a pintar de niña, y es también el objeto de su última exposición —«La Sal»—, inaugurada durante la pandemia de COVID-19 en el Real Jardín Botánico de Madrid (un proyecto que había iniciado su itinerancia en el CAAC de Sevilla y en el Patio Herreriano de Valladolid). Sin abandonar el realismo que practicó a lo largo de su vida, en fragmentos de estos cuadros se observa un desarrollo de los blancos hacia la abstracción, que se ha conectado con la obra de Agnes Martín. Existe diálogo y contaminación, por tanto, entre este último retrato y las salinas, que comparten una atmósfera silenciosa y serena, reflejo no solo de lo que veía Laffón, sino también de lo que la emocionaba. Una pintura que requiere sosiego y tiempo de contemplación.

Isabel Tejeda

 
Por:
Roberto Díaz
Carmen Laffón
Sevilla 1934 - Sanlúcar de Barrameda 2021

Pintora y escultora figurativa, es una de las figuras más destacadas del realismo español de la segunda mitad del siglo XX, con una obra de corte lírico e intimista que despliega en paisajes, naturalezas muertas y retratos. Se inició en la pintura desde muy joven con el pintor Manuel González Santos. Posteriormente ingresó en la Escuela de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla (1949-1952), y continuó sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, licenciándose en 1954. Completó su formación primero en París y después en la Academia Española en Roma (1955-1956) con una Beca del Ministerio de Educación.

Laffón diluye los límites entre pintura, dibujo y escultura, profundizando en la captación de la luz y la mutación cromática de los motivos. Desde finales de los años cincuenta su pintura ha representado el paisaje del Guadalquivir, desde La Cartuja hasta Sanlúcar de Barrameda y el Coto de Doñana, así como su entorno más cotidiano, destacando su finca La Jara, en series que desarrolla a lo largo del tiempo, incorporando a su obra la tradición y la modernidad, desde la influencia del paisajismo de Camille Corot hasta la abstracción de Mark Rothko, en escenas de atmósferas sutiles con una tendencia hacia la composición a través de estructuras mínimas y hacia la disolución de las formas, pero siempre ligada a una profunda observación de lo real, como se refleja en series como El Coto desde Sanlúcar que inició en los años ochenta mediante pequeños pasteles, o la serie de óleos de gran formato realizados entre 2005 y 2014. Desde los años noventa desarrolla también obra escultórica, que parte de su interés por lo cotidiano y el objeto, unificando los motivos a través del tratamiento pictórico de las superficies a modo de pintura expandida, como en sus recientes series dedicadas a la viña o la cal.

Laffón se vincula al grupo de artistas en torno al estudio El Taller (1967-1969), junto a Teresa Duclós y José Soto, y también a la Galería La Pasarela de Sevilla. Desde mediados de los años sesenta pasó a formar parte de los artistas de la Galería Juana Mordó, donde expuso en 1967. En 1992 el Museo Reina Sofía le dedicó su primera retrospectiva. Posteriormente realiza exposiciones individuales en la Sala Amós Salvador (Logroño, 1996); el Centro Cultural Casa del Cordón (Burgos, 2001); la Fundación Rodríguez-Acosta (Granada, 2006); o el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (Sevilla, 2014-2015), entre otras. En 1982 se le concedió el Premio Nacional de Artes Plásticas del Ministerio de Cultura; en 1999 ganó la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes; y en el 2000 ingresó como académica numeraria en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. En 2013 fue nombrada hija predilecta de Andalucía.

Roberto Díaz

 
 
VV. AA. Carmen Laffón en Silos: la viña, Madrid, Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, 2007.