El cabezal de este reloj de caja alta luce un copete denominado «de pagoda», flanqueado en las esquinas por adornos en forma de bola de metal dorado. Dos columnas de fustes acanalados y capiteles dóricos, a los lados de la puerta con cristal que protege la esfera del reloj.

La esfera es de metal dorado. El dial horario, fabricado en metal plateado, lleva las cifras horarias en números romanos y los minutos —de cinco en cinco— en números árabes. Encima del dial principal, otro auxiliar para el silenciador de sonería. Debajo de la cifra de las XII, ventana donde se aprecia la firma del relojero: «John Wirans // London». En el resto de la esfera, placas caladas de metal dorado. Las agujas son de metal plateado.

El tronco o cuerpo que sostiene el cabezal es de líneas rectas, y el zócalo presenta un perfil rectangular. Una puerta, en el frente del tronco, está simplemente adornada con una moldura.

Ante el aumento de demanda de estos objetos, a finales del siglo XIX se imitaron y copiaron los relojes del siglo XVIII.

Amelia Aranda Huete