El viento inmóvil

El viento inmóvil

  • 2005
  • Papel impreso calado y alfileres sobre tabla (DM)
  • 204 x 247 x 10 cm
  • Cat. P_743
  • Adquirida en 2008
Por:
Beatriz Herráez

El viento inmóvil (2005) es un lienzo de gran tamaño en el que están suspendidos distintos recortes de mapas calados mediante alfileres. Una cartografía que remite al imaginario producto de las derivas y détournements llevadas a cabo por los miembros de la Internacional Situacionista en la década de 1960; mapas imaginarios que recorren la geografía de la ciudad proponiendo una experiencia renovada de la urbe a partir de la fragmentación. En concreto, El viento inmóvil nos conduce a la emblemática imagen The Naked City, la reordenación — psicogeográfica— de París propuesta por Guy Debord en 1957. Con la particularidad de que la pieza de Jorge Macchi parece elevarse y flotar sobre el lienzo, como una frágil escultura producida en papel que se deja atravesar por el viento.

En el análisis de estos modelos urbanos «desviados», que tienen en la figura del flâneur y el merodeador a sus protagonistas inmediatos, se inscriben igualmente obras previas del artista. En Buenos Aires Tour (2003), Macchi proponía ocho itinerarios para un turismo alternativo y «desinformado» en la capital argentina, que venían precedidos o determinados por la rotura de un vidrio sobre el plano de la ciudad. En un gesto que remitía directamente a la noción de azar duchampiano, el artista ideaba recorridos para el redescubrimiento de la ciudad a partir de lo efímero, lo accesorio y el accidente.

En una conversación mantenida con María Iovino en 2016, el autor describía su proyecto titulado Guía de la inmovilidad (2003) como «un cuadernillo que en cada hoja mostraba una parte del mapa de Buenos Aires [...] En este cuaderno corté todas las manzanas de tal forma que solo quedaron las calles y avenidas. Por efecto del calado se veía a través de las páginas una compleja trama de calles. En el momento de hacer este trabajo obsesivo me preguntaba qué pasaría en una ciudad en la que no existieran los lugares para estar, para la intimidad, para el trabajo, para el esparcimiento, en síntesis, una ciudad sin lugares a donde ir. Sería una ciudad en donde lo único que se podría hacer sería estar inmóvil, claro que después de un primer momento de movimiento frenético y desesperación».

Beatriz Herráez

 
Por:
Roberto Díaz
Jorge Macchi
Buenos Aires 1963

Cursó estudios en la Escuela de Bellas Artes de Buenos Aires, que finalizó en 1987. Su oposición al neoexpresionismo de la transvanguardia, dominante en su país, lo llevó a unirse al Grupo de la X ese mismo año, con quienes realizó pinturas y objetos escultóricos que parten del elemento cotidiano y residual que va a desarrollar a lo largo de su trayectoria. Su obra evolucionó a partir de 1996, cuando fue invitado por la Rotterdam Kunststichting para una residencia con la agrupación Duende Artists Initiative y, posteriormente, en otras en Londres y Alemania. Su obra derivó hacia una poética de lo cotidiano y lo banal con piezas que se ordenan bajo nuevas relaciones semánticas y visuales que confluyen en la paradoja, introduciendo al espectador en un contrasentido cargado de tensiones e incógnitas, en el que queda atrapado. En ellas se hace referencia al azar, el accidente, la fatalidad y la muerte, a través de aspectos como el tiempo y lo musical, donde destacan las obras realizadas en colaboración con el compositor Edgardo Rudnitzky. En su obra hace visible la diferencia entre la compresión lógica que tenemos del mundo y nuestra experiencia sensible de él.

Su trabajo ha sido ampliamente reconocido, con becas como la otorgada por la John Simon Guggenheim Memorial Foundation (Nueva York, 2001); con premios, entre los que destaca el Premio Banco de la Nación de Argentina (2000); y con muestras individuales en instituciones como las celebradas en el Museo Arte Moderno de Buenos Aires (1998); el Museo de Arte Contemporáneo de Amberes (Bélgica, 1998); el Blanton Museum (Austin, Estados Unidos, 2007); el Centro Galego de Arte Contemporánea (Santiago de Compostela, 2008); el Künstlerhaus Bremen (Alemania, 2009); la Pinacoteca do Estado de São Paulo (2009); y, más recientemente, en el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (2016) y el Centro de Arte Dos de Mayo (Móstoles, Madrid, 2017). También ha participado en eventos internacionales como las bienales de La Habana (2000), Estambul (2003), São Paulo (2004), Venecia (2005) y Porto Alegre (Brasil, 2007).

Roberto Díaz

 
 
VV. AA. Colección Banco de España. Catálogo razonado, Madrid, Banco de España, 2019, vol. 3.