Formado en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, primero, y luego en la de Barcelona (1980), recibió la Beca por la Diputación de Gipuzkoa para completar sus estudios en la Universidad de Columbia, trasladándose en 1986 a Nueva York, ciudad donde residió y que marcó su trayectoria artística. Su obra pictórica parte de la pintura americana de campos de color para incidir en los aspectos etimológicos y físicos del medio. Desde inicios de los años noventa parte de cierta tridimensionalidad para reflexionar sobre la significación, las posibilidades y las limitaciones de los materiales, en capas de pigmento que corta o rasga, enfrentando lo material con lo visual y sus implicaciones metafísicas. Posteriormente evolucionó hacia el uso de capas translúcidas de color realizadas con polímeros líquidos que crean en superficie formas indefinidas prácticamente monocromáticas de diversas intensidades y luminosidades, lo cual contrasta con la fuerte estratificación cromática que se percibe en los cantos de la obra que deja a la vista del espectador, desentrañando su materialidad y procesualidad respecto a su superficie ilusoria. Con el cambio de siglo sus obras se hacen más vibrantes y se centran en la luz como elemento definitorio a través de colores tenues o saturados que parecen diluirse en formas indefinidas hacia el blanco, cuyo punto culminante es la serie Highlights (2004-2005); en ella amplía y difracta en formas desenfocadas el espectro visible del color a partir de la luz blanca, hacia una desmaterialización de la superficie pictórica.
Desde sus primeras muestras en 1985, su obra ha tenido una fuerte presencia tanto en Norteamérica como en Europa, destacando las exposiciones individuales celebradas en la Sala Rekalde (Bilbao, 1994); el Palacio de los Conde de Gabia (Granada, 2002); el Centro- Museo Vasco de Arte Contemporáneo de Vitoria- Gasteiz (2009); el Centro de Arte Contemporáneo de Caja de Burgos (2005); y el Museum Gegenstandsfreier Kunst (Otterndorf, Alemania, 2011). A finales de 2017 su obra participó en una exposición colectiva en el Museo Guggenheim Bilbao titulada «El arte el espacio», donde ya expuso en 1999. Durante su estancia en Estados Unidos ha mostrado su obra en distintos centros de Nueva York, San Francisco, Los Ángeles y Toronto, estando muy vinculado a la Jack Shainman Gallery de Nueva York y a la Galería Helga de Alvear de Madrid.
Irazabal ha recibido la Beca de Creación Artística Banesto (Madrid, 1989) y la Beca de Artes Plásticas del Gobierno Vasco (1990).
Formado en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, primero, y luego en la de Barcelona (1980), recibió la Beca por la Diputación de Gipuzkoa para completar sus estudios en la Universidad de Columbia, trasladándose en 1986 a Nueva York, ciudad donde residió y que marcó su trayectoria artística. Su obra pictórica parte de la pintura americana de campos de color para incidir en los aspectos etimológicos y físicos del medio. Desde inicios de los años noventa parte de cierta tridimensionalidad para reflexionar sobre la significación, las posibilidades y las limitaciones de los materiales, en capas de pigmento que corta o rasga, enfrentando lo material con lo visual y sus implicaciones metafísicas. Posteriormente evolucionó hacia el uso de capas translúcidas de color realizadas con polímeros líquidos que crean en superficie formas indefinidas prácticamente monocromáticas de diversas intensidades y luminosidades, lo cual contrasta con la fuerte estratificación cromática que se percibe en los cantos de la obra que deja a la vista del espectador, desentrañando su materialidad y procesualidad respecto a su superficie ilusoria. Con el cambio de siglo sus obras se hacen más vibrantes y se centran en la luz como elemento definitorio a través de colores tenues o saturados que parecen diluirse en formas indefinidas hacia el blanco, cuyo punto culminante es la serie Highlights (2004-2005); en ella amplía y difracta en formas desenfocadas el espectro visible del color a partir de la luz blanca, hacia una desmaterialización de la superficie pictórica.
Desde sus primeras muestras en 1985, su obra ha tenido una fuerte presencia tanto en Norteamérica como en Europa, destacando las exposiciones individuales celebradas en la Sala Rekalde (Bilbao, 1994); el Palacio de los Conde de Gabia (Granada, 2002); el Centro- Museo Vasco de Arte Contemporáneo de Vitoria- Gasteiz (2009); el Centro de Arte Contemporáneo de Caja de Burgos (2005); y el Museum Gegenstandsfreier Kunst (Otterndorf, Alemania, 2011). A finales de 2017 su obra participó en una exposición colectiva en el Museo Guggenheim Bilbao titulada «El arte el espacio», donde ya expuso en 1999. Durante su estancia en Estados Unidos ha mostrado su obra en distintos centros de Nueva York, San Francisco, Los Ángeles y Toronto, estando muy vinculado a la Jack Shainman Gallery de Nueva York y a la Galería Helga de Alvear de Madrid.
Irazabal ha recibido la Beca de Creación Artística Banesto (Madrid, 1989) y la Beca de Artes Plásticas del Gobierno Vasco (1990).