Estudió en la Escuela Massana de Barcelona, y continuó su formación en Francia, concretamente en Grénoble y París. Su primera exposición de relevancia tuvo lugar en el Espai 13 de la Fundació Miró de la ciudad condal en 1994.
Su trabajo, que se mueve fundamentalmente entre la fotografía, el vídeo y la instalación, se articula en dos grandes temas: los espacios del arte y el paisaje a través del viaje. Construye sus proyectos a partir de series, siguiendo alguna de estas inquietudes. En los espacios del arte ha reflexionado sobre la memoria, como en su importante serie Paisaje secreto (2004), para la que fotografió las casas de importantes coleccionistas de arte de manera que el espectador curioso podía acceder visualmente a ellas por un vano.
Respecto a su producción paisajística, fotografía espacios naturales y arquitecturas. Son ámbitos en los que el ser humano es un sujeto omitido que puede rastrearse por sus huellas; lugares en los que se aprecia el paso del tiempo y que están teñidos por una atmósfera de soledad que algunos autores han identificado con paisajes interiores. Sus fotografías de grandes formatos suelen instalarse en el espacio expositivo, generando un trompe l’oeil por el que se mueve el espectador; un espacio otro al que no puede acceder físicamente pero en el que es posible adentrarse de forma mental e imaginar lo que ha quedado fuera del encuadre. Como ha dicho Aurora García, «es el espectador con su cuerpo móvil y su configuración interna quien se erige en el auténtico personaje de sus trabajos».
Soto ha realizado exposiciones individuales en la Sala Montcada (Barcelona, 1996); el Koldo Mitxelena Kulturuneko (Donostia/ San Sebastián, 2004); la Fundación Telefónica (Madrid, 2004); el Museo Reina Sofía (Madrid, 2005); el Centre d’Art La Panera (Lleida, 2006); el Museo Patio Herreriano (Valladolid, 2007); o el Centre d’Art Santa Mónica (Barcelona, 2007), entre otros.
Estudió en la Escuela Massana de Barcelona, y continuó su formación en Francia, concretamente en Grénoble y París. Su primera exposición de relevancia tuvo lugar en el Espai 13 de la Fundació Miró de la ciudad condal en 1994.
Su trabajo, que se mueve fundamentalmente entre la fotografía, el vídeo y la instalación, se articula en dos grandes temas: los espacios del arte y el paisaje a través del viaje. Construye sus proyectos a partir de series, siguiendo alguna de estas inquietudes. En los espacios del arte ha reflexionado sobre la memoria, como en su importante serie Paisaje secreto (2004), para la que fotografió las casas de importantes coleccionistas de arte de manera que el espectador curioso podía acceder visualmente a ellas por un vano.
Respecto a su producción paisajística, fotografía espacios naturales y arquitecturas. Son ámbitos en los que el ser humano es un sujeto omitido que puede rastrearse por sus huellas; lugares en los que se aprecia el paso del tiempo y que están teñidos por una atmósfera de soledad que algunos autores han identificado con paisajes interiores. Sus fotografías de grandes formatos suelen instalarse en el espacio expositivo, generando un trompe l’oeil por el que se mueve el espectador; un espacio otro al que no puede acceder físicamente pero en el que es posible adentrarse de forma mental e imaginar lo que ha quedado fuera del encuadre. Como ha dicho Aurora García, «es el espectador con su cuerpo móvil y su configuración interna quien se erige en el auténtico personaje de sus trabajos».
Soto ha realizado exposiciones individuales en la Sala Montcada (Barcelona, 1996); el Koldo Mitxelena Kulturuneko (Donostia/ San Sebastián, 2004); la Fundación Telefónica (Madrid, 2004); el Museo Reina Sofía (Madrid, 2005); el Centre d’Art La Panera (Lleida, 2006); el Museo Patio Herreriano (Valladolid, 2007); o el Centre d’Art Santa Mónica (Barcelona, 2007), entre otros.