Realizó sus estudios superiores de Bellas Artes en la Städelschule de Fráncfort (Alemania) entre los años 2003 y 2008. Continuó su especialización en la New York University, de la que fue artista visitante en 2008. Actualmente reside entre Berlín y Londres.
Artista interdisciplinar, su trabajo se sirve indistintamente de la fotografía, el dibujo, la ilustración, el audio, la escultura o la instalación para centrarse en el análisis de los signos y símbolos que emanan de los objetos contemporáneos. Este uso recontextualizado de los objetos actuales y su capacidad para ser instrumentos de utilidad al tiempo que concebirse como fetiches subraya las fronteras inasibles entre ambos ámbitos, conectando lo contingente y lo espiritual. Un discurso que ha sido leído en clave arqueológica: como objetos hallados que deben ser interpretados a partir de significados cifrados, objetos utilizados como panoplias de supervivencia. Loboda ha declarado su interés por el conocimiento intuitivo y por la historia del arte: «Me inspiro en la tradición artística, el conocimiento detrás de la artesanía, los sistemas, los materiales, los ingredientes que una necesita para crear algo. Tengo miedo de ser profesional en cualquier oficio. Prefiero ser una visitante, que no habla el idioma particularmente bien, pero entiende lo suficiente como para malinterpretarlo a sabiendas».
Maria Loboda ha expuesto, entre otros, en en el Bielefelder Kunstverein (Alemania, 2009); el Museo Reina Sofía (Madrid, 2013); el Kunstverein Braunschweig (Alemania, 2013); o el CAC Contemporary Art Centre (Vilnius, Lituania, 2017). Ha participado en la Documenta 13 (Kassel, Alemania, 2012) y en la Bienal de Taipéi (Taiwán, 2014).
Realizó sus estudios superiores de Bellas Artes en la Städelschule de Fráncfort (Alemania) entre los años 2003 y 2008. Continuó su especialización en la New York University, de la que fue artista visitante en 2008. Actualmente reside entre Berlín y Londres.
Artista interdisciplinar, su trabajo se sirve indistintamente de la fotografía, el dibujo, la ilustración, el audio, la escultura o la instalación para centrarse en el análisis de los signos y símbolos que emanan de los objetos contemporáneos. Este uso recontextualizado de los objetos actuales y su capacidad para ser instrumentos de utilidad al tiempo que concebirse como fetiches subraya las fronteras inasibles entre ambos ámbitos, conectando lo contingente y lo espiritual. Un discurso que ha sido leído en clave arqueológica: como objetos hallados que deben ser interpretados a partir de significados cifrados, objetos utilizados como panoplias de supervivencia. Loboda ha declarado su interés por el conocimiento intuitivo y por la historia del arte: «Me inspiro en la tradición artística, el conocimiento detrás de la artesanía, los sistemas, los materiales, los ingredientes que una necesita para crear algo. Tengo miedo de ser profesional en cualquier oficio. Prefiero ser una visitante, que no habla el idioma particularmente bien, pero entiende lo suficiente como para malinterpretarlo a sabiendas».
Maria Loboda ha expuesto, entre otros, en en el Bielefelder Kunstverein (Alemania, 2009); el Museo Reina Sofía (Madrid, 2013); el Kunstverein Braunschweig (Alemania, 2013); o el CAC Contemporary Art Centre (Vilnius, Lituania, 2017). Ha participado en la Documenta 13 (Kassel, Alemania, 2012) y en la Bienal de Taipéi (Taiwán, 2014).