Considerado uno de los grandes renovadores de la pintura andaluza de la segunda mitad del siglo XX, Manuel Salinas se inició en el arte a través de una práctica figurativa que, a raíz de un viaje a Estados Unidos en 1970, evolucionó en favor de una abstracción de corte lírico, de inspiración norteamericana y próxima a lo que, a partir de entonces, se convirtió en una de sus señas de identidad: la búsqueda incesante del color y la forma. De ahí que se defina como un pintor estrictamente abstracto.
Su primera exposición individual tuvo lugar en 1962 en la Galería la Rábida (Sevilla). A partir de entonces su obra se ha mostrado en galerías de arte e instituciones españolas e internacionales como el Centro Gres (Barcelona, 1964); el Museo de Arte Contemporáneo de Sevilla (1982); el Museo Español de Arte Contemporáneo (Madrid, 1982); la Casa de Velázquez (Madrid, 1984); el Colegio de Arquitectos de Sevilla (1987); la Sala Municipal de Exposiciones Lonja de Pescado (Alicante/Alacant, 1996); el Salón Avianca (Barranquilla, Colombia, 1996); el Museo Nacional de Arte de Rumanía (Bucarest, 2003); el Museo Danuviana (Bratislava, 2003); o la Fundación RAC (Pontevedra, 2014), entre otros.
También participó en eventos artísticos como la Bienal de Obra Gráfica de Segovia (1975); el Festival de Pintura Monte de Piedad (Monte de Piedad, Sevilla, 1984); o el Salón de los 16 en el Museo Español de Arte Contemporáneo (Madrid, 1984). Su obra forma parte de los fondos de los museos de Arte Contemporáneo de Madrid, Sevilla y Tenerife; la Colección Olivetti; el Ayuntamiento de Nerva; el Museo Reina Sofía; la Fundación ”la Caixa”; el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo; y la Colección Avianca de Colombia. En 2017 recibió la Medalla de Oro de la ciudad de Sevilla y fue nombrado académico de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría (Sevilla).
Considerado uno de los grandes renovadores de la pintura andaluza de la segunda mitad del siglo XX, Manuel Salinas se inició en el arte a través de una práctica figurativa que, a raíz de un viaje a Estados Unidos en 1970, evolucionó en favor de una abstracción de corte lírico, de inspiración norteamericana y próxima a lo que, a partir de entonces, se convirtió en una de sus señas de identidad: la búsqueda incesante del color y la forma. De ahí que se defina como un pintor estrictamente abstracto.
Su primera exposición individual tuvo lugar en 1962 en la Galería la Rábida (Sevilla). A partir de entonces su obra se ha mostrado en galerías de arte e instituciones españolas e internacionales como el Centro Gres (Barcelona, 1964); el Museo de Arte Contemporáneo de Sevilla (1982); el Museo Español de Arte Contemporáneo (Madrid, 1982); la Casa de Velázquez (Madrid, 1984); el Colegio de Arquitectos de Sevilla (1987); la Sala Municipal de Exposiciones Lonja de Pescado (Alicante/Alacant, 1996); el Salón Avianca (Barranquilla, Colombia, 1996); el Museo Nacional de Arte de Rumanía (Bucarest, 2003); el Museo Danuviana (Bratislava, 2003); o la Fundación RAC (Pontevedra, 2014), entre otros.
También participó en eventos artísticos como la Bienal de Obra Gráfica de Segovia (1975); el Festival de Pintura Monte de Piedad (Monte de Piedad, Sevilla, 1984); o el Salón de los 16 en el Museo Español de Arte Contemporáneo (Madrid, 1984). Su obra forma parte de los fondos de los museos de Arte Contemporáneo de Madrid, Sevilla y Tenerife; la Colección Olivetti; el Ayuntamiento de Nerva; el Museo Reina Sofía; la Fundación ”la Caixa”; el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo; y la Colección Avianca de Colombia. En 2017 recibió la Medalla de Oro de la ciudad de Sevilla y fue nombrado académico de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría (Sevilla).