João Louro

Lisboa 1963

Por: Beatriz Herráez

Desde sus primeras muestras individuales a comienzos de los años noventa, João Louro ha desarrollado un importante cuerpo de trabajo en el que encontramos fotografía, vídeo, pintura o instalación. En sus propuestas son habituales las citas a la historia de la filosofía, la literatura y el arte moderno —desde las vanguardias históricas hasta el minimal y el conceptual—, pero también son frecuentes los guiños a las manifestaciones de la cultura popular occidental, principalmente el cine y la música. Un sistema de correspondencias y asociaciones construido a partir de un rico entramado de referencias por el que deambulan nombres como los de Gustave Flaubert, Samuel Beckett, Walter Benjamin, Herman Melville, por citar tan solo a algunos de los personajes presentes en sus piezas.

João Louro desarrolla un proyecto interesado en el análisis de los límites del lenguaje y la reflexión en torno a la construcción de las imágenes en el mundo contemporáneo. Una imagen saturada por el signo que, en ocasiones, llega a presentarse como una superficie ciega, como un espejo que devuelve su mirada al espectador, encargado de decodificar el material a partir de ese momento.

Louro fue elegido para representar a Portugal en la Bienal de Venecia (2015) con el comisariado de María de Corral. Presente en numerosas citas internacionales —Oporto, París, Río de Janeiro Santa Mónica, entre otras ciudades—, su obra también ha sido objeto de muestras individuales en instituciones como el Museu de Arte Contemporánea de Elvas (Portugal, 2015); el Museo d’Arte Contemporanea di Roma (2010); y la Fundació Joan Miró (Barcelona, 2001).