Estudió Bellas Artes en la Universidad de Barcelona. Desde finales de los años ochenta comenzó a realizar obras de corte conceptual en las que cuestiona las nociones tradicionales del arte mediante estrategias de no intervención sobre los materiales que utiliza, en las que lo contingente y el componente temporal se convierten en elementos determinantes en el resultado de la obra, en un distanciamiento que cancela la subjetividad autoral y su componente manual. Aplica una metodología muy controlada y unas condiciones previas que no deben alterarse. Utiliza también conceptos lingüísticos, principalmente en relación a la pintura, con los que crea tensiones entre sus elementos y los términos y sistemas de clasificación que los definen. Otra vertiente fundamental de su obra deriva hacia el cuestionamiento de los dispositivos de representación de lo cotidiano procedentes de los medios de comunicación mediante un proceso de recopilación, acumulación, clasificación y presentación seriada de fotografías y titulares de prensa que descontextualiza, convirtiéndolos en referencias abstractas que provocan un alejamiento respecto a lo real y enfrentando al espectador a la complejidad de lo cotidiano y a la variedad de matices que lo constituyen.
Aballí ha participado en eventos internacionales como la Bienal de Sídney (1998) o la Bienal de Venecia (2007) y ha realizado exposiciones individuales en el Museo Reina Sofía (Madrid, 2002 y 2015); el Museu d’Art Contemporani de Barcelona (2005); la Ikon Gallery (Birmingham, Reino Unido, 2006); el Zentrum für Kunst und Medientechnologie (Karlsruhe, Alemania, 2006); el Today Art Museum (Beijing, 2009); la Pinacoteca do Estado (São Paulo, 2010) y el Centro-Museo Vasco de Arte Contemporáneo de Vitoria-Gasteiz (2012).
Estudió Bellas Artes en la Universidad de Barcelona. Desde finales de los años ochenta comenzó a realizar obras de corte conceptual en las que cuestiona las nociones tradicionales del arte mediante estrategias de no intervención sobre los materiales que utiliza, en las que lo contingente y el componente temporal se convierten en elementos determinantes en el resultado de la obra, en un distanciamiento que cancela la subjetividad autoral y su componente manual. Aplica una metodología muy controlada y unas condiciones previas que no deben alterarse. Utiliza también conceptos lingüísticos, principalmente en relación a la pintura, con los que crea tensiones entre sus elementos y los términos y sistemas de clasificación que los definen. Otra vertiente fundamental de su obra deriva hacia el cuestionamiento de los dispositivos de representación de lo cotidiano procedentes de los medios de comunicación mediante un proceso de recopilación, acumulación, clasificación y presentación seriada de fotografías y titulares de prensa que descontextualiza, convirtiéndolos en referencias abstractas que provocan un alejamiento respecto a lo real y enfrentando al espectador a la complejidad de lo cotidiano y a la variedad de matices que lo constituyen.
Aballí ha participado en eventos internacionales como la Bienal de Sídney (1998) o la Bienal de Venecia (2007) y ha realizado exposiciones individuales en el Museo Reina Sofía (Madrid, 2002 y 2015); el Museu d’Art Contemporani de Barcelona (2005); la Ikon Gallery (Birmingham, Reino Unido, 2006); el Zentrum für Kunst und Medientechnologie (Karlsruhe, Alemania, 2006); el Today Art Museum (Beijing, 2009); la Pinacoteca do Estado (São Paulo, 2010) y el Centro-Museo Vasco de Arte Contemporáneo de Vitoria-Gasteiz (2012).